martes, 15 de febrero de 2011

Porque nos dimos cuenta de que nuestros corazones no podían ser engañados.

Estoy cansada. El nuevo horario de clase es horrible, así como las asignaturas. Bueno, concepciones del hombre y derechos humanos es soportable, quizá. Pero esa de métodos y técnicas de no se qué movidas para no se qué cosas es una mierda enormísima, vamos. Un marrón de los grandes.
Llevo dos días sin dormir, no me lo creo. Quizá eso es lo que ha provocado que le haya dado tantas vueltas a la cabeza y haya pensado tanto en tantas cosas. El lado bueno es que esta será la primera vez que me atreva a escribir algo fantástico de verdad, algo que roce el vampirismo pero solo de forma simbólica, no quiero reinventar Crepúsculo, por dios. Pero me gusta como está quedando el resultado.
El lado malo es que me he dado cuenta de que, después de todo, algo faltaba. Quizá lo eclipsaba la necesidad de libertad, de fuerza, de voluntad, de valentia para seguir adelante. O tal vez solo lo oculté porque era problemático pensar en tantas cosas a la vez. Pero definitivamente, hay cosas que no quiero perder, otras que quiero recuperar y otras que quiero gritarle al mundo.
¡Empezando por el carné del coche que esta inútil vaga se tenía que haber sacado en verano! La cosa es que la gente lo hace en verano porque no tienen cosas mejores que hacer... yo las tenía. Acababa de empezar mi frikismo descontrolado por los doramas japoneses y en ese momento, leñe, no podía parar. Todo era demasiado nuevo, demasiado atractivo como para dejarlo. Qué irónico, ni que fuera una droga o algo por el estilo. De todas formas, aprovecharé este semestre y su horario de no clase de los miércoles, jueves y viernes por la mañana para ir a ver si soy capaz de manejar un cacharro de estos de cuatro ruedas que te pueden llevar a cualquier lado si vienen con un gps, claro, sino, acabarás en cualquier lado al que no quieras ir. Y más yo que tengo la orientación en el culo, que le voy a hacer. Me perdería hasta en mi propia casa si fuera un poco más grande, no me encontraría ni con brújula, básicamente porque tampoco se usarla.

http://www.youtube.com/watch?v=80owStIAY1Y

Me gustaría poder hacerlo de verdad todo, voy a intentarlo a ver. No es que nada me haya motivado o dado fuerzas para seguir, es solo que, si no siguiera adelante, alguien como yo no tendría a donde volver.

3 comentarios:

  1. Veo que to bee free va marcando fuerte, eh.

    Intenta descansar, en serio. Y deja de dar vueltas a las cosas por una vez en tu vida, leches (en el sentdo malo me refiero).
    Tú eras feliz viendo doramas, no? pues ya está, que le peten al carnet, de aquella no era importante, deja de darle vueltas.

    Además confio en ti, y sé que podrás hacer lo que te propongas, solo haz lo que yo ya hago, confiar en ti misma.

    ResponderEliminar
  2. Todos queremos to be free.
    Dormir no es tan importante...
    Felicisima, sobretodo descubriendo el mundo de secretos que ocultaban tras de sí, como cantantes, música fantástica y coincidencias absurdas e increíbles. De todas formas, el carne me hubiera venido muy bien cuando Silvia se puso mala para subir al hospital sin tener que esperar a los refuerzos conductores, ¿sabes? Eso es lo que me ha hecho darle vueltas y decidirme a intentar sacarlo.

    Ah, que genial, tu ya lo haces. Ya confías en ti misma, ya era hora XP

    ResponderEliminar
  3. Lo sé.
    Podrás sacarlo.
    ¬¬ confiar en ti idiota, no en mi

    ResponderEliminar